Hace casi 2 años atras, escribi un post acerca de mi perro Fat, en el cual contaba lo enfermo que estaba.
Pues bien, Fat lucho y lucho como un duque durante todo este tiempo.
Hasta que hoy finalmente, decidio dejar de dar batalla.
Se me acaba de ir una gran parte de mi y de mi historia.
Intento pensar que ahora esta mejor, que ya no sufre. Pero no puedo evitar extrañarlo y llorar porque ya no va a estar conmigo.
Supongo que, aunque me duela, fue lo mejor para él.
Faty, siempre te voy a llevar en mi corazón.
Hasta siempre.